¿Qué es el Vidrio Templado?

El vidrio que recibimos de las fábricas se denomina “recocido” y se le puede someter a varios procesos, uno de ellos es el de templado.

Dicho proceso de temple consiste en aumentar la temperatura de la masa del vidrio, casi hasta su punto de fusión (aproximadamente unos 700°C), seguidamente y mediante chorros de aire sobre su superficie, enfriarlo bruscamente, consiguiendo de esta manera modificar sus características físicas en los muchos aspectos:

► RESISTENCIA MECÁNICA CONTRA EL IMPACTO

► RESISTENCIA AL CHOQUE TÉRMICO

► RESISTENCIA MECÁNICA CONTRA LA TRACCIÓN

► RESISTENCIA MECÁNICA CONTRA LA COMPRESIÓN

Una vez templado, el vidrio es unas 4 veces más resistente a la rotura por impacto, pero caso de producirse la rotura se rompe también el equilibrio de tensiones que adquirió en el proceso de temple, lo cual produce una liberación de energía que hace que el vidrio se desintegre en múltiples pedazos diminutos de aristas redondeadas, por lo que es prácticamente imposible que produzcan daños de consideración.

La moderna maquinaria de última generación de la que dispone Templaval nos permite ofrecer un vidrio Templado de gran calidad, gracias a esto, nuestra empresa tiene un gran nivel de planimetría y nos permite laminar vidrios templados de distintos espesores, algo que muy pocas empresas en nuestro país pueden realizar.